Una costumbre muy arraigada en internet, es la de subir las fotos tal cual salen de nuestra cámara o movil, sin preocuparnos de cuanto miden o pesan. las subimos a nuestro Facebook o blog y no nos preocupamos de más. Pero bien, las aplicaciones como Facebook, por poner un ejemplo, disponen de un programa interno que optimiza las fotografias que se suben, adecuándolas a las necesidades de sus recursos.
¿Por qué tenemos que optimizar las fotos que subimos a nuestra web?
En nuestra web personal o de nuestra empresa, si no disponemos de un gestor de contenidos apropiado que realice la optimización de las fotos que subimos, tendremos que hacerlo nosotros mismos de manera manual antes de subirlas.
¿Cómo optimizo mis fotos de manera manual?
Existen aplicaciones de tratamiento de imágenes, como puede ser el conocido Adobe Photoshop, etc. Pero no nos compliquemos con herramientas complejas, porque lo que nosotros necesitamos es algo que nos reduzca las dimensiones de la foto y el peso de la misma. Para ello, hay herramientas OnLine que son perfectas para este propósito. Nos podemos encontrar con una que dispone Solución Individual y que es de uso gratuita. La podemos encontrar en este artículo. Es muy sencilla de utilizar. Además, dispone de un enlace a un vídeo donde nos muestra cómo utilizar ésta herramienta.
¿Y qué valores de optimización le doy a mi foto?
Cuando sacamos una fotografía de nuestra cámara digital o móvil, por lo general viene con las características de la cámara, que son máximos de megapixels. Esto equivale a fotografias que miden más de 1600pixeles de ancho y pesan de 2 MB en adelante. Por lo que no sería sotenible una página web que tuviera fotografías con éstas características.
Si tenemos una fotografía que mide 4608×2592 pixeles y que pesa 2618KB, y queremos subirla a nuestra web, lo ideal sería reducirla a un tamaño proporcional que se adapte al espacio que tenemos en la web. Por ejemplo, esa misma foto si la adaptamos en tamaño a 300×170 pixels, con una calidad de imagen en JPG de 80% la reducción sería bastante considerable, ya que solo ocuparía 31KB, lo cuál reduce el tiempo de carga de nuestra web y el consumo de recursos.
Por otro lado, podemos tener la fotografía que mostramos en la web reducida y otra igual alojada pero con mayor resolución. Por ejemplo 800 pixels sería suficiente para ver una fotografía bastante bien por internet. Al pulsar sobre la imagen pequeña lo que haríamos sería mostrar la imagen grande que solo se visualiza en los casos que alguien quiera verla más grande. Esto es una práctica habitual de muchas webs.
¿En qué afecta el poner fotos de mucho peso en mi web?
Afecta primero y más importante, a la velocidad de carga de tu página web. Si tienes una página de inicio con 4 fotografias que pesan 2MB cada una, aunque virtualmente las hallas reducido de tamaño para que se vean pequeñas y encajen en el espacio de tu página, cuando se vea tu página, ésta será lenta de carga. Y si la visualizan desde un móvil, puede que hasta las fotos no lleguen a cargarse y no se vean.
Otro aspecto al que afecta y no se le presta mucha importancia, es al ancho para la tranferencia de datos que tengamos contratado con nuestro alojador web. Cuanto más megas tengan nuestras fotos, más transferencia consumimos, y total, si optimizamos las fotos se verán igual y además no consumirán tantos recursos y la carga será más ligera, haciendo que nuestra web sea sostenible.
Optimizar es lo mejor.